«Muertos están todos los dioses, ahora queremos que viva el superhombre»
"Así habló Zaratustra";
Nietzsche, Friedrich Wilhelm
Though so profound a double-dealer, I was in no sense a hypocrite; both sides of me were in dead earnest; I was no more myself when I laid aside restraint and plunged in shame, than when I laboured, in the eye of day, at the futherance of knowledge or the relief of sorrow and suffering.
The strange case of Dr. Jekill and Mr. Hyde Robert Louis Stevenson,
"Tonight is Christmas Eve-Christmas Eve, 1957. Outside my window the snow is falling lazily and silently; very faintly I can hear a radio playing. Someone is singing "Ave Maria". It seems a good time for reminiscence. Thirty-three years and three month ago I came to the Illinois State Penitentiary at Joliet to serve sentences of life and of ninety –nine years for murder and kidnapping. I was nineteen then. This is the thirty-fourth Christmas Eve I have spent behind these walls."
Así literalmente Nathan Leopold comienza su libro Life Plus 99 years, el cual fue publicado en el 1958 después de 33 años de prisión.
Los Hechos
En el año 1924, en Chicago, Illinois, las autoridades policíacas detuvieron a dos jóvenes de familias muy prominentes en lo que rápidamente se conocería como el Crimen del Siglo. Los jóvenes arrestados eran sospechosos de haber asesinado a Bobby Franks, niño de 14 años, vecino de los detenidos. El asesinato fue planificado con la intención de realizar el crimen perfecto. Por este asesinato fueron arrestado Nathan Leopold, Jr. 19 años de edad y Richard Loeb de 18. Ambos estudiantes sobresalientes en sus estudios académicos. Leopold se distinguía por ser el graduando más joven en la historia de la Universidad de Chicago y Loeb el más joven de la Universidad de Michigan. Al momento de los hechos, Leopold había comenzado sus estudios de derecho en la Universidad de Harvard y Loeb en la escuela de derecho de la Universidad de Chicago.
Tarde en la mañana del dìa 21 de mayo de 1924, ambos jóvenes conducían por el vecindario en busca de una víctima para su morboso experimento; la mala fortuna le advino a Bobby Franks, vecino de los implicados y pariente de Loeb. En niño fue obligado a entrar en el asiento delantero del auto. Mientras uno conducía, el otro le cubría la boca evitando sus gritos desesperados y asestaba una y otra vez fuertes golpes con un cincel causando su muerte.
En el camino se detuvieron a cenar mientras el cuerpo sin vida yacía en el baúl del automóvil que había sido rentado previamente. Ya caída la noche arrojaron el cuerpo del niño en un recodo del camino, lugar donde Leopold acostumbraba observar aves. Para evitar su identificacióndesfiguraron su rostro vertiendo ácido en la cara del niño.
Los próximos pasos consistieron en destruir toda prueba que pudiera incriminarlos y solicitar el dinero de rescate. El dinero, lejos de ser requerido por necesidad, como es Richard Loeb y Nathan Leopold costumbre en los casos de secuestro, era un requisito necesario como parte del plan para despejar cualquier otra consideración. En la tarde del próximo día, los padres del pequeño recibieron las instrucciones de pagar 10,000 dólares como condición para mantener al niño con vida. El dinero nunca fue pagado ya que en la mañana siguiente del crimen ya las autoridades habían informado a la familia Franks del asesinato de su hijo. El niño había sido encontrado por un celador de vías del tren. Junto al cuerpo se encontraron unos lentes de los que se sospechaba podrían pertenecer al asesino.
Clearence Darrow
El Juicio
El juicio causó gran sensación en la comunidad, principalmente al publicarse que el motivo de los jóvenes era lograr el crimen perfecto. El pueblo exigió la pena de muerte para ambos acusados.
El juicio fue todo un evento que quedaría marcado para la historia. La defensa de Leopold y Loeb estuvo a cargo de Clarence Darrow, criminalista de gran renombre en la comunidad letrada del momento. La defensa de Darrow fue impecable. Darrow sorprendìa al fiscal aceptando la culpabilidad de sus defendidos, aun cuando tanto Leopold como Loeb ya se habían declarado inocentes. La magistral defensa convirtió el crimen del siglo en el juicio del siglo. El aceptar la culpabilidad permitía que el juicio se llevara por derecho y no por jurado, lo que evitaba que la determinación de culpabilidad fuera tomada a base de la impresión que el crimen pudiera haber tenido en el jurado.
Darrow basó la defensa en su teoría determinista, doctrina que aseguraba que ambos acusados habían actuado seguidos por instintos creados por la sociedad. Sus argumentos, basados en la escuela de psicología social, postulaban que el individuo es formado por la misma sociedad que ahora lo trataba de juzgar. -¡No son los acusados los únicos responsables! - argumentaba Darrow. ¡La sociedad también es responsable y es injusta una sentencia tan severa como la pena de muerte!. El letrado pidió compasión, no sólo para los acusados sino para toda la raza humana. Si la evidencia demuestra que las desiciones humanas son determinadas por fuerzas más allá del control del actor, entonces éste no era merecedor de un castigo tan severo como la pena de muerte. Darrow solicitó la reclusión perpetua a cambio de la pena de muerte. Insistía en la responsabilidad vicaria de la sociedad. Los jóvenes no deberían ser responsables de lo transmitido genéticamente por sus ancestros, del ambiente que lo rodeaba y a final de cuentas, de lo aprendido en la escuela y la universidad. Sus actos habían sido estimulados en gran medida por los postulados de Nietzsche, uno de los pensadores modernos más influyentes del siglo XIX. Los jóvenes no deberían ser castigados por los actos de otros. El juzgador dictaminó la reclusión de por vida. Al poco tiempo, Loeb fue asesinado en la prisión donde cumplía su sentencia. Leopold, realizó varios trabajos sociales durante su reclusión y escribió un libro autobiográfico sobre su experiencia en prisión.
En el 1958, Nathan Leopold es liberado después de 33 años de prisión. Ese mismo ano publica Life Plus 99 Years, obra autobiográfica donde comenta sus años de prisión y recomendaciones para mejorar el sistema carcelario. Con el estigma de su actuación y con el peso de varias películas producidas sobre el asesinato, Leopold emigró al pequeño poblado de Castañer en Lares, Puerto Rico. Allí trabajó en el hospital de la localidad. Estudió un grado de maestría en la Universidad de Puerto Rico, trabajó en el Departamento de Salud y realizó investigaciones en la Escuela de Medicina de la Universidad sobre la enfermedad de lepra y ofreció clases en la Universidad de Puerto Rico. Leopold que conocía más de 15 idiomas, terminó su maestría siendo académicamente el primero en su clase. Aún cuando mantenía gran interés en continuar estudios graduados, esto no fue posible por las restricciones impuestas como requisito a su liberación.
Su interés en la ornitología (estudio de las aves) lo llevó a realizar estudios en Puerto Rico logrando el reconocimiento de científicos en la Isla. Aquí redescubrió la Paloma Sabanera, especie que se pensaba extinta. En el 1967 la Estación Experimental de Puerto Rico publicó un panfleto donde listaba las aves de Puerto Rico.
Al día de hoy el arrepentimiento de Leopold continúa en entredicho. Algunos de los que lo conocieron dudaron de su arrepentimiento. A fin y a la postre, Leopold era un gran admirador del Superhombre de Nietzsche, que describía al hombre como un ser que acepta el Eterno Retorno, pues cuando toma una decisión realmente la quiere tomar, y no se arrepiente de sus actos.
Nathan Leopold murió el 30 de agosto de 1971 después de diez días de hospitalización en Puerto Ric. Su córneas fueron donadas a quienes las necesitaban.
Excelente!
ResponderEliminar